Incapacitar a una persona mayor con demencia es un procedimiento no muy complejo, que hay que hacer con abogado y procurador. Al mismo tiempo se debe solicitar nombramiento de tutor. Se aporta documentación familiar para ver quién debe ser el tutor y médica para acreditar la incapacitación. De todas formas lo reconocerán el juez y el forense. Si el forense opina que está para incapacitarlo, lo más probable es que se le incapacite.